Lo que en otros tiempos fue todo un símbolo de progreso, se ha convertido hoy en un mero elemento decorativo e inservible. Nos referimos a las míticas cabinas telefónicas, que poco a poco desaparecen de la escena urbana en aplicación de la Ley General de Telecomunicaciones, aprobada en 2019, que deja de considerarlas como servicio esencial.

Con esa ley llegaba una medida singular: la eliminación definitiva de elementos obsoletos como las cabinas telefónicas y las guías telefónicas. Esta semana, operarios de la compañía han retirado la que permanecía operativa en la plaza del Ayuntamiento de El Campello.

Más del 88% de la población española reconoce no haber usado nunca una de esas cabinas. Al parecer, se ha decidido que tres de estos elementos perduren en El Campello casi a modo de escultura vintage. El resto de cabinas serán eliminadas en los próximos días.